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29 de abril de 2019

Comunicación afectiva en el aula

    Tengo tanto que aprender en el terreno de la afectividad, sobre todo en lo que a comunicación afectiva se refiere, que no sé si algún día me daré por satisfecha. No sé si en algún momento conseguiré una comunicación verbal y no verbal coherentes entre sí y beneficiosas para mi alumnado y para el clima del aula. Pero no voy a dejar de trabajar en ello. Este año estoy dando mis primeros pasos en el tema y aunque reconozco que tengo mucho camino por recorrer y que no es un camino fácil, no soy de las que se rinde con facilidad. 

    He leído los textos propuestos en esta unidad y he de decir que aunque algunas cosas ya "las sabía" el enfoque desde la perspectiva del maestro que busca un clima afectivo y emocional positivo me ha hecho reflexionar acerca de qué hago y qué no hago en el aula. Y por lo tanto pensar y proyectar todos los cambios que debo hacer para el bien no sólo de mis alumnos a nivel personal, sino también a nivel curricular, de aprendizaje y aprovechamiento de éste.

    He encontrado información muy interesante en la lectura de los textos. Le confirmación del profesor (concepto con el que no me había encontrado con anterioridad) que incide en aspectos que se han ido repitiendo a lo largo de la documentación me ha parecido de gran importancia para el desarrollo de unas clases que tengan en cuenta el ámbito emocional de los protagonistas en el aula.

    También me ha resultado de gran interés, además de muy emotiva, la lectura "¿Sabemos escuchar con el corazón?" de José Ramón Díaz (@Gudariz).
El artículo de Marta Albaladejo Mur sobre la comunicación no verbal en el aula me ha resultado muy útil no sólo por la claridad con la que está escrito sino por las pautas y ejemplos tan sencillos que da para acometer estos primeros pasos que me ocupan.

    Resultado de la lectura detenida de todos ellos, los citados anteriormente y también los no citados, he elaborado esta infografía tal vez demasiado sencilla visualmente, pero que para mí reúne la esencia de cómo debería nuestra comunicación en el aula. Esos pequeños consejos que he extraído de los textos los encontraréis debajo de cada una de las estrellitas.


    Me doy cuenta, tras realizar este análisis de lo importante que es la empatía y la imitación y de cómo puede ayudarnos en el proceso de enseñanza (fijando nuestra atención en las buenas conductas en lugar de en las menos positivas) y también en el de aprendizaje (aprendemos imitando, comprendemos el entorno que nos rodea gracias a las neuronas espejo, y no hay aprendizaje sin comprensión).
De gran importancia también en la educación es la conexión social, cómo una cambio en la voz, en la entonación, en la velocidad del habla... o cómo un gesto puede modificar un comportamiento ya sea para mejorarlo o empeorarlo. Del mismo modo nos indican la relevancia que tiene permitir la acción en el aula (un cerebro que actúa es un cerebro que comprende) y también el conocimiento de los alumnos entre sí. Permitir las interacciones en la clase son fundamentales para alcanzar ese clima afectivo que tanto buscamos y que nos va a permitir un desarrollo del proceso de enseñanza-aprendizaje más fructífero.
De qué manera la escucha puede hacer que un niño se sienta aceptado o no, querido o no, o como dice el artículo "Affect in teacher talk" confirmado o desconfirmado.
La tolerancia hacia el otro, la comprensión de cada uno de nuestros alumnos, la comunicación desde el punto de vista más completo y complejo (lenguaje verbal y lenguaje no verbal) están presentes en todos los documentos mostrándonos los efectos que tienen nuestros mensajes.

27 de abril de 2019

Mi identidad

    A la derecha en este blog podéis ver el avatar que me acompaña desde algún tiempo. Sonriente. Feliz. Corresponde a un estado que me acompaña (aunque no creáis que siempre estoy así, tengo muchos malos momentos que no me hacen sentir como en la imagen).
Estoy abrazada a la luna, cerca de las estrellas, soñando... 
Soñando con las cosas que me gustaría llegar a hacer, a conseguir en mi aula.
Y una de ellas es crear un ambiente de afectividad positivo, utilizar un lenguaje adecuado, controlar mi cuerpo, mi voz, mis gestos... en definitiva comunicar lo mismo con mi lenguaje verbal y no verbal.
Os dejo una presentación que realicé para otro curso que también trataba el tema de la comunicación afectiva en el aula.


Y dejo también una música con la que me siento identificada: música tranquila, instrumental (bandas sonoras de películas)... Suelo trabajar con este tipo de música aunque, desgraciadamente, tiene derechos de autor y no puedo ponerla en este espacio.
Pero la melodía que comparto ahora con vosotros es muy parecida a la música que suelo escuchar así que... sirve perfectamente para que me conozcáis un poquito más.